Diferente

No esperaba nada, sentado como siempre en un paradero, de madrugada, solo mirando al horizonte, pensando lo mucho que se demoraba el bus que me haría retornar a casa. Por años , fue la imagen que describía en forma figurativa, cuando preguntaban por mi situación sentimental.

Desde el 2009 dando tumbos, sin expectativas, solo imaginandome sentado en un paradero en la madrugada, creo que era lo más fácil, nadie te molesta, nadie te arrastra a tener esperanzas o ilusiones, solo existes. Una historia fallida tras otra, no te daban ningún indicio de querer volver a intentarlo, siempre el mismo paso que me dejaba peor de como comenzaba.

Nunca fui de esos hombres "Machos Alfa", a ratos no tenía esa convicción o la "Pachorra" suficiente, el de "Creerme el cuento". No digamos que soy un "Adonis", pero, siempre lograba sin interés de mi parte atraer una que otra fémina; Consiente o no, la cosa es que alguien siempre se arriesgaba, pues claro, mi alma de "Padre Pío" me hizo ver como la salvación a los males de uno que otro prospecto algo desequilibrado y bien denominado "Pasteles".

Siempre contuve, siempre comprendiendo, o apoyando... Pero, ¿Yo que?... Nada, acababa siendo el que se quedaba sin "Pan ni pedazo" (No lo digo en el contexto de Mártir o de provocar el típico "Pobrecito"), solo digo que mi "Ojo Clínico" era uno de los peores que puedes tener. El tiempo pasó, jamás me casé, jamás tuve el supuesto "Hijo" y no fui a enterrar por enfermedad a nadie.

Solo me quedé en el paradero de buses, sentado, fumando un tabaco, con las piernas cruzadas y apoyándome en mis rodillas, mientras observaba pacientemente como la ceniza se hacía cada vez más flácida y larga de aquél cigarrillo. Llegó un día, que las cosas cambian, algunos lo atribuyen a coincidencia, otros más místicos a "Vidas pasadas", yo digo "A razón o la fuerza", no lo sé, creo que por mucho me cuestioné la "Inmortalidad del cangrejo", muerto de miedo, "Rey de los peros", inseguro, sin realmente querer a alguien, sin tomar riesgo alguno, quedé con ese gusto agridulce al darme cuenta que en realidad jamás quise de buenas a primeras, debo reconocerlo; Fue un proceso, con el transcurso del tiempo me fui "Enganchando", fui teniendo admiración por ese otro y como resultado final... enamorarme.

Debo ser honesto, a otras solo las estimé, me esforcé, pero simplemente, no hubo caso. Siempre conciliador y cobarde no corté como se debe, me daba la sensación de pena al hacerlo, si que prefería "Aburrirlas"; Lo sé, algo estúpido y sin un grado de inteligencia emocional. Los días, meses y años hicieron que sanara mis heridas, que por cierto eran más grandes de lo que yo mismo creía, de hecho, mis inseguridades por un lapso prolongado de esta provocaron terror y las cubría con la imagen de "Ella", cosa que no debió ser jamás.

"¡Oh!, pobre de mi" dije gritando al cielo... ¡Patético!, sin brillo alguno, en ese punto empecé el proceso de escarbar y sacar todo eso que por años se acumuló. Lo logré, salió todo, me costó 3 años, cambié mi cáscara y lo más importante saque la pena de mi corazón , pude liberarlo por fin... Respiré, libre de "Karmas", fui un poco más allá y me volví a preguntar: ¿Estás ahí?, la respuesta se vino un 18 de Marzo y me convencí de que nada es para siempre, incluso para alguien tan diferente como lo soy yo.