Terminó un ciclo, así lo sentí, los "Karmas" amargos que arrastraba por más de 2 años han dado su último suspiro, mis miedos que se generaron por fin han cesado. Me arriesgué a seguir quizás en un trabajo que me acomoda, pero que no es lo óptimo, es estable y complementa mi vida de "Freelance" de Diseñador Gráfico.
De un momento a otro la visión por la cual persistía tercamente fue cediendo, a un punto que mi propia intransigencia desapareció, permanentemente arranqué de responsabilidades, de afectos, de afrontar mi realidad... prefería resguardarme en un mundo hermético, solo con cercanos, manteniéndolos siempre cerca y con una comunión siempre permanente.
Este año se presentó de distinta forma, dejando ir, como también un poco molesto con parte de mi familia, no con mis padres o abuelo (Que a estas alturas es lo único contractual que me mantiene ligado al resto). Una mala jugada de un primo en el cual confiaba desató la decepción, la pena se transformó en un poco de rencor... No me gusta que me utilicen y menos de la forma que lo hizo, en fin, son procesos que el año pasado fueron molestos y como dije, este año simplemente dejé ir, sin preocuparme de tener certeza si estoy o no en lo correcto.
Por casualidades en mi trabajo "Formal" corrí el riesgo de no escapar, simplemente opté y puse en practica el dicho "Mejor pájaro en mano, que 100 volando", acepté una certificación que me abre puertas que ni siquiera tenía presupuestadas o imaginadas, una cosa lleva a la otra como una cadena de dominó.
Por lo demás después de casi 3 años he abierto un poco mis brazos y alguien fue lo suficientemente acorde a mi, e inesperadamente hemos ido por la senda de hacer las cosas con calma. No lo busqué, no lo quise de ese modo, pero, me atreví, quizás con esto pueda también dañar afectos de personas las cuales aprecio con todo mi corazón, puede que estruje unos corazones los cuales no quiero dañar por nada del mundo, pero, también debo velar por mi, por lo que en este momento siento y quiero.
No lo busqué, no lo pedí, pero, un ciclo se cerró, ahora comienza una nueva historia, un mes lleno de gratas sorpresas, tratando de hacer las cosas como corresponden, tomando con seriedad lo que se me pide, ha sido un camino lleno de dolor, lleno de miedos, por momentos apestosos y singularmente depresivos, pues, después de la tormenta, han aflorado destellos que indican nuevos aires que trataré de aprovechar...